Saltar al contenido

Burning Man. La apoptosis urbana y la capacidad organizadora del desorden

burningman.jpg

Destruir/construir, una dialética tan asimétrica

Destruir es tan fácil. Ya sea para la naturaleza o para el hombre o mejor aun para los dos juntos. Construir es lento y difícil. Preparar una cocina exquisita como la del Bulli lleva medio dia, un cocinero por comensal, una tecnología sofisticada y casi 20 años de conocimiento previo. Y la degustación en este caso si bien dura algunas horas en otros casos la proporción es aun mas asimétrica. Horas o días para prepararlo, minutos para degustarlo.

Pero donde los contrastes son mas abusivos, donde las dificultades se pueden entrever en una escala mayor, donde la dialéctica creación/destrucción alcanza niveles realmente llamativos es en la planificación urbana. Crear ciudades que inevitablemente serán arrasadas por el tiempo, pero que en el transcurso serán la demostración mas ambiciosa y especulativa de lo que pretende el ser humano y de lo que difícilmente logre sostener por mas de algunos décadas, siglos o milenios, es una tarea mayúscula.

Construir una ciudad, un Estado o una Nación como ladrillos legos temporales que se van encastrando los unos con los otros, es hasta el día de hoy la mas ambiciosa de las tareas humanas y una de las pocas en las cuales pretendemos actuar como dioses.

Software que nos haces tan mal pero igual te queremos tanto

Si el modelo de la ciudad nos fascina es porque no se trata simplemente de casas y edificios, de calles y de circulación, de infraestructura y de materiales, sino también del software que hace vivible, posible, plausible y respirable un entorno urbano. Que le permite mantenerse, expandirse, estabilizarse y eventualmente superarse a si mismo.

Porque con las casas y las calles vienen las personas y las conductas, porque junto al mundo material viene inextricablemente unido el simbólico, porque la felicidad del todo exige articulación de materia y forma en modos sutiles y pocas veces previsibles.

Y una vez que tenemos ejemplos, también tenemos rankings y hay ciudades que se consideran vivibles y otras insalubres, y hay ciudades que atraen y otras que repelen (no casualmente Richard Florida ha elaborado un cuestionable pero al mismo tiempo fascinante ranking de las ciudades mas creativas del mundo; Juan Freire ha hecho otro tanto Bienvenidos a la explosión de los ránkings de ciudades). Pero sobretodo lo que nos interesa es saber que mínimos y máximos de esto y de lo otro debe haber en una ciudad (en su diseño, planificación, autoorganización) para ser considerada un manjar suculento o un guiso atroz.

Simulando ciudades de varios modos distintos

Por eso nos fascinó hace un tiempo la aparición de un programa de simulación como SimCity que mas alla de sus exageradas simplificaciones y de sus burdas ecuaciones deterministas empezaba a brindarnos atisbos de lo que es diseñar la complejidad.

Y por eso también nos llamó tanto la atención Second Life hace año y medio atrás como otro ejemplo de modelaje posible de un futuro urbano complejo, aunque en este caso virtual. Lamentablemente Second Life demostró ser mas ruido que nueces y no terminó ayudando a darnos los inputs necesarios para entender el mundo real – mejor aun su mejora y superación.

¿Será que los mundos sintéticos de los que disponemos actualmente son insuficientes? Por suerte hay otros modelos posibles de creación desde cero, en el mundo real. Se trata de las ciudades efímeras a medida , de los conjuntos urbanos planificados para suicidarse, de la apoptosis urbana (para un recorrido de esa prpblemática e indicios de su exportación no-reduccionista a lo social ver Apoptosis. El suicidio programado de las celulas http://www.filosofitis.com.ar/2003/12/20/apoptosis-el-suicidio-programado-de-las-celulas/#more-407. Y si bien en el mundo hay varios ejemplos de este tipo el que mas tiene que par enseñarnos hasta el momento es Burning Man que ya cumplidos sus primeros 20 años es al mismo tiempo modelo de uso y ejemplo de antimundo real simultáneamente.

Burning Man se dice de muchos modos distintos

Burning Man es un festival de arte que todos los años, a finales de Agosto, se organiza en el desierto de Nevada. Es un evento fascinante que demuestra la fuerza de la creatividad de redes sociales auto-organizadas y desafía cada año, al menos durante una semana, muchas de las teorías habituales sobre el funcionamiento de las comunidades humanas y de las agregaciones urbanas.

Como bien nos recomendara hace un tiempo Juan Freire quien quiere saber de que se trata puede consultar muy encarecidamente los articulos de Brian Doherty en Reason, así como su libro This is Burning Man. Si se prefiere una aproximación visual, este libro publicado recientemente es otra buena opción: Burning Book: A Visual History of Burning Man. En 2008, Burning Man tiene como tema el nacionalismo (2008 Art Theme: «American Dream»).

Veamos de que se trata, porque tiene tanto que enseñarnos y donde están sus limite si es que los tiene

Pocas reglas y muchos resultados

Resulta impresionante la capacidad de desarrollo de una ciudad desde cero en pocos días, con escasas reglas y autoridades muy limitadas. Una de las razones para conocer este evento, según Kevin Kelly en International Burning Man, 2008, es asistir a “uno de los mejores cursos en planificación urbana y diseño de comunidades”, en el que se puede observar el espectacular nacimiento y desarrollo de una ciudad efímera “siguiendo unas pocas reglas fundamentales y permitiendo que el desorden auto-ensamble el resto”.

Si Kelly esta mas que interesado en estos temas es porque el viene trabajando la idea de leyes de lo viviente desde el menos su maravillo Out of Control y posteriormente en forma un tanto oportunista y al calor de la primera vez que se cebo la burbuja interneteana en Las nuevas leyes de la nueva economía.

A nosotros las nueves leyes divinas nos pegaron fuerte y fue tema de análisis y examen en muchos cuatrimestres en la cátedra de Procesamiento de Datos.

Para Kelly Burning man es mas que llamativo porque permite observar el espectacular nacimiento y desarrollo de una ciudad efímera “siguiendo unas pocas reglas fundamentales y permitiendo que el desorden auto-ensamble el resto”. Todo un ejemplo para el diseño y planificación urbana en otras ciudades más convencionales. En todo caso, la arquitectura si marca aquí la diferencia, de un modo paradójico, por su propia destrucción: “Burning Man has a delete button” que se oprime una vez al año.

Pocas leyes, mucho mas que ninguna

Ojo no se trata ni de Walden Two ni de un falansterio fouriersteriano sino de una comunidad libertaria. No es que no haya reglas. Las hay y muy pocas pero las hay. El mínimo compatible con la expresividad, la creación y la riqueza comunicativa, la inversa precisa de la burocracia.

No menos interesante es recordar que Burning Man ya tiene 20 años de vida y que paso de su localización original a partir de una decena de fanáticos en San Francisco a una enorme ciudad efímera en el desierto de Nevada (era la quinta en el 2000 y se ha convertido en la tercera, después de Reno y nNevada en el 2007), ha ido evolucionando sus reglas. En esa pequeña cantidad de la que hablamos antes, hoy son mucho mas que al principio y mucho menos que las que operan en cualquier ciudad permanente.

Cuando los concurrentes no sobrepasaban los 2000 todos podían ayudar a montar al Hombre a quemar con sogas. Tampoco hacían falta las calles ni los señalamientos. La basura que se generaba a lo largo de una semana se iba con quienes la habían producido. Casi no había patrullaje policial

Con las 40.000 personas que asisten actualmente hace falta un ejercito de gente solo para que se ocupe de los baños. Se ha prohibido la circulación en la ciudad principal donde solo pueden transitan peatones y bicicletas. Dormir se ha convertido en una costumbre saludable ya que no se corre el riegos de que alguien aprovechando la inexistencia de calles pise las bolsas de dormir.

Apoptosis urbana ¿Y con el consumo que?

También se prohibió que la gente detentara armas con lo cual muchos problemas menores también fueron desvaneciéndose. En el 2007 hubo solo una decena de incidentes menores, la mayoría ligados a la venta (no a al consumo) de droga y a una par de ataques entre conocidos, no desconocidos.

Cada vez que se enactua una nueva ley se la resiste violentamente. Pero lo cierto es que aunque la fiesta solo dura una semana (seria imposible que la gente pudiera operar exclusivamente en una economía del don como ocurre aquí, muchao mas radical que la del trueque, y a años luz de las economías de mercado que conocemos nosotros) queda al descubierto en ese ejemplo que debería ser mas conocido y analizado, lo que se puede lograr con muy pocas reglas y que el desorden se ocupe del resto.

Si hasta ahora la experiencia ha sido tan exitosa (hay quienes imaginan que la ciudad podría crecer hasta llegar a tener 1 millón o 2 millones de habitantes circunstanciales) es porque se trata de una ciudad a plazo fijo, con suicidio (apoptosis urbana) incluído.

Porque así como se la construye la ciudad es destruida hasta los cimientos cada año. Y se crea una nueva desde cero. Lo que sirve para que esta ciudad tenga una tasa de aprendizaje que ninguna otra en el mundo puede aspirar a tener ni mucho menos ejercitar.

Black Rock -sede del Burning Man- es una ciudad eternamente en fase beta, un centro urbano que es manejado gracias a un software en permanente evolución.

En este sentido es infinitamente mas rico como ejemplo y modelo que SimCity, que SecondLife y muchos otros ejemplos de Autómatas Celulares con los que hoy contamos. Quien descifre el DNA de Burning Man tendrá una código fantástico para mejorar el diseño de ciudades cuyo resultado como Brasilia, Riyahd y la propia Buenos Aires dejan tanto que desear.

Y no olvidar que a diferencia de los mundos sintéticos que van del dinero virtual al real y vuelta, aquí no hay transacciones de ninuna especie -salvo unas minimas por cafe y hielo en el microcentro. El resto de las tareas que se necesitan o consiguen son absolutamente gratuitas, espontáneas y en términos no de reciprocidad sino del mas violento kula del que nos hablaba Malinowski mentando a los argonautas del pacífico occidental.

Videos

Video “time lapse”. Muestra como a lo largo de la semana del evento en 2007 “la ciudad” crece hasta, al final, quemarse.

Journey to the Flames – 8 Years of Burning Man

Burning Man: Beyond Black Rock (2004)

Publicado enEventosGestión InnovaciónIrreduccionismoReveladoresSoftware SocialVirtual/Artificial

6 comentarios

  1. Alejandro, pregunta. ¿Son compatibles las autorganizaciones dentro de otro sistema jerarquico? ¿Puede convivir este tipo de estructura social con sistemas piramidales?

  2. […] No dejó de ser una experiencia fuerte para nosotros que somos fanáticos de los sistemas autoorganizados. […]

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *