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Explorando los bordes y contornos de la Universidad 2.0

El evento que vivimos en la Universidad Internacional Menendez y Pelayo fue realmente excepcional. No solo por la cincuentena de asistentes, que mas que duplicó la asistencia del año pasado, sino por la calidad de las exposiciones, los productos que se relevaron y expusieron y el interés que los participantes tienen en estos temas.

No es común tener a Olga Gil García y a Ana Maria LLopis, a Brian Kelly y muy especialmente a Steve Hargedon en un curso como University 2.0.

Nuestras ruminaciones fueron muy bien recibidas, y mejoramos muy mucho nuestra presentación sobre el Paréntesis de Gutenberg de hace un mes atrás, añadiéndole una serie de matices acerca de la post-universidad que publicaremos mañana y pasado. Así que contemos qué y cómo acontenciò todo.

Sexto cruce del Atlántico en lo que va del año 2010

Porque lo hicimos otra vez. Digo nuevamente crucé el Atlántico. Estos viajes largos que empiezan lentos, como que cuando llega el momento de la cena una hora o dos después de partidos, parece que las 10 u 11 horas que están por delante no pasarán nunca, y como el sábado me tocó un urso enorme que ocupó todo el espacio de la buenísima butaca de la salida de emergencia que habia conseguido, me resultó absolutamente imposible, intentar siquiera abrir el teclado y escribir algo.

Por suerte pude hacerlo sobre papel, aprovechando una presentación impresa que había preparado para la apertura de la reunión de esta semana en Santander donde durante tres intensos dias nos estamos dedicando a sacarle los trapos a la universidad como pocas veces lo hicimos en casa.

Y como hace pocos días falleció José Luis Brea, a quien nunca conocí personalmente pero de cuyas obras disfruté mucho, y porque casualmente buscando otros libros cayó en mis manos Cultura_RAM. Mutaciones de la cultura en la era de su distribución electrónica publicado en el 2007 (completo aquí), que inesperadamente contenía un capítulo integro dedicado a las universidades, el avión fue el lugar indicado para mechar lugares comunes, slides rimbombantes pero poco analíticas, ideas y conceptos, que han venido desfilando en los últimos meses por mi pantalla interna, junto con los aportes de Brea, que sabía de que hablaba, mostraba haciendo donde debíamos ir, nos evitaba encallar en los lugares comune, e hizo aportes mas que interesantes para la quijotada que hemos emprendido esta semana en la Universidad Menendez y Pelayo en Santander.

Se juntan aquí muchos cruces y conviene recorrerlos con cierto detalle y cuidado. Porque este es mi tercer viaje a Santander, pero el segundo que hago en 2 meses. Parecen días nomas cuando estuve en el seminario organizado por la misma universidad cuando iniciaba sus cursos de verano sobre Finanzas y Tecnología y con Pepe de la Peña llegamos a ver el prometedor, pero finalmente vacuo, triunfo de Argentina sobre México.

Mas de lo mismo y sin embargo todo tan distinto

Parece que hubiese sido hace años que vine por primera vez aqui invitado por Red.es para participar de Internet en el aula, pero en rigor fue ayer nomas en el 2008). Y en el medio han pasado tantas pero tantas cosas, hemos participado de tantos eventos y encuentros, hemos colaborado en tantas iniciativas y búsquedas, que eso que contamos hace dos años y que en su momento quería ser adalidad y paradigma, ahora los vivimos apenas como ensayos mas que loables, pero demasiado juveniles e ingenuos, tratando de ingresar en nuevos formatos y soportes que recién ahora toman forma mas afiatada.

En general cada día me interesa menos presagiar acerca el futuro de.. sea del periodismo o de la industria editorial, de la publicidad o de la educación. Ya hemos visto zozobrar tantos pronósticos, tantas promesas no se han cumplido, y además hay una nueva figura que emergió en el horizonte en el último quinquenio, y que recién ahora vemos perfilarse con osadia y atrevimiento.

Nos referimos al estilo tan típico de todas las profesiones P de reformar a la reforma, de hacer como que asimilan el consejo y la propuesta, y después finalmente vuelven a hacer lo mismo de siempre, bajo el mote de rectificación de nombres -algo que hemos visto reeditarse en algunos ejemplos de ejemplos aquí en la UIMP.

En el sistema educativo esto se está dando con los modelos 1@1 que están siendo deglutidos a través de una serie de procedimientos bien conocidos. Primero se apuesta a una supuesta sorpresa y como el sistema educativo muere de su propia inercia, se solicita la intervención de un tercero excluido especializado en saber hacer antes que en saber decir: LATU en Uruguay, ANSES en Argentina, probablemente Ministerio de Industria en España.

Pero en seguida se cuestiona a las instituciones estratégicas en la movilizaciòn tecnològica sin cuyo concurso jamás se habrìa hecho nada, y para cerrar la operación y la expectativa, se inunda de cursos de capacitación y renovación, hechos en partes iguales por entusiastas que quieren y saben, y por instituciones que los dejan hacer, para que en definitiva todo la movida permita que la infraestructura ideológica no cambie, la escuela siga hegemonizando paradigmas inservibles y los pedagogos (o los didactas poco importa la diferencia) mantengan su teledirigismo.

Reformando la reforma, desempoderar a los alumnos para reempoderar a los profesores

Porque seamos sinceros a mi me encanta que miles de docentes quieran hacer los cursos que proponen los Ministerios nacionales y provinciales para deglutir la «invasión» de las máquinas, solo que no se hasta que punto esos cursos permitirán alfabetizar digitalmente a los docentes siguiendo el decálogo que quedo clarísimo hace algunos días en Technology Skills We Should Be Teaching in College, que incluyen no menos de 60 actividades divididas en Basic Web Stuff, Organization, Communication, Finding and Managing Information, Privacy, Security, and the Law, Presentation, y Ways to Learn.

Porque para trasmitir la mayoría de estas habilidades no necesitamos de clases ni de grandes teorizaciones sino de voluntarios y mucho autoaprendizaje, o al trevés a manos de reverse mentors. No necesitamos de cursos de capacitación sino de Educamps. No necesitamos manuales y compendios, sino de una apertura mental y una voluntad de rediseño ontológico inexistente en la mayoría de esas iniciativas que terminan siendo instrumentales y defensivas.

Porque lo que estamos viendo con la supuesta educación 2.0 y mucho mas con la supuesta formación 2.0, es infinitamente mas de lo mismo. El empaquetamiento de contenidos, la pasteurización de las carecteristicas disruptivas de la web 2.0 en el rediseño de los autores, y en definitiva un intento desesperado de reempoderar a los docentes para compensar el reempoderamiento tecnológico de los alumnos.

Apologìa retórica de lo abierto

Resulta altamente autocontradictorio y en definitiva no solo frustrante, sino también insidioso, hacer la apología de lo abierto (con sus limitaciones claro ya que ciertas disciplinas y habilidades se adquieren a veces mas fácilmente secuencialmente que en paralelo), y después ver como lo que hay en vez de educación 2.0 es retórica 2.0. Ayudada es claro por la falta de una voluntad institucional de cambio y sobretodo por una corporación docente renuente a la renovación y al cambio de actitud

Por suerte hubo muchos ejemplos durante el seminario de la UIMP que desarmaron estas resistencias, y mostraron que las posibilidades de acción son muchas, y que a veces los evangelistas, early adopters y convencidos, no profundizamos lo suficiente, y no aprovechamos los espacios y grietas que hay por doquier, en las corporaciones para avanzar decididamente hacia nuevas formas de cooperación y colaboración-

Un breve paneo sobre este extraordinario gráfico Sharing Is Contagious: An Infographic on the Rise of Collaborative Consumption, muestra que compartir es contagioso. y que una vez que se abre la caja de Pandora del peer to peer todo intetnto de cerrarla acudiendo a atajos y constricciones no va a funcionar.

Y puesto que las habilidades digitales a esta altura son un stem (una raiz) de igual peso que las ciencias y las artes, pero irreductibles a estas , mucho de lo que charlamos en el seminario debe ser revisado y profundizado. Y debemos hacernos cargo en mayor detalle y operacionalidad de esos quiebres culturales que finalmente son ignorados en estas reproapiaciones repedagogizantes y neutralizantes.

Siempre amenazados por la tentación del paradigma de enunciación

Una de las palabras que mas se escucho en Santander, además de 2.0 fue abierto. Había algo muy potente en la idea al punto de que se la repetía insistentemente. Especialmente a medida que fuimos profundizando en los temas de la galaxia 2.0 pasando de la docencia 2.0 a la formación 2.0 e incluso a la ciencia 2.0, habiendo quedado en una nebulosa el tema de los alumnos 2.0. Nada casualmente es claro

Para quienes venimos trabajando en el tema del cambio en dirección de la educación disruptiva esta seguidilla de usos del OPEN puede eventualmente seguir este itinerario

Open Data
Open Knowldege
Open Course
y por fin y lo mas interesante Open Acreditation

Pues bien, habiendo detectado la introducción de estos nuevos caballos de troya nos vemos compelidos, cuando hablamos de la Universidad del futuro, a tomar distancia respecto de dos tentaciones simétricas igualmente edulcoradas y sin mayor futuro.

Por un lado pintar con un barniz 2.0 a la universidad existente, y creer que se está haciendo un cambio sustantivo, cuando en realidad se trata apenas de un edulcorante. O sostener a la inversa que la universidad critica debe resistirse con todas sus fuezas a la avalancha 2.0, que en definitiva no seria mas que una excrecencia de la corporación tecnológica y el negocio del diseño de negocios (miren sino la tapa de esta semana de la revista alemana Focus dedicada a Steve Jobs).

Ambas opciones nos parecen igualmente perfidas y no son los caminos que estamos recorriendo, ni que queremos recorrer. La universidad actual no tiene cura ni salvación. Al menos la esencialmente transmisora, convertida en un repositorio, autoelogiosa consigo mismo, diciendose guardiana del espíritu critico y de la denuncia del mundo realmente existente.

Pero tampoco creemos que la solución pase por salvar la distancia que va de la universidad que enseña a la que investiga, por la creación de empresas spin-off que hagan I+D para después pasarlas al sector privado, y en definitiva esas formas mas alambicadas y ricas en muchos sentidos de mashup entre diseño y negocios, que nos parecen variantes a explorar en cursos y carreras eventualmente, pero que de ningún modo ofrecen parámetros o baremos para la reconstrucción de la universidad como un todo

Un diagnóstico que no por conocido es menos desesperanzador

En la presentación que hicimos el pasado lunes avanzamos mucho mas alla de las generalidades que habíamos establecido hace un mes atrás desde el Parentesis de Gutenberg aplicado a las profesiones P. Nos parece ingenuo y trivial empezar en Bolonia, deslizarmos a través de la Universidad de Lost, mostrar el ejemplo de nuestro trabajo en la UBA como un antídoto, y finalmente terminar abogando por un previsible, pero poco denso trabajo colaborativo en red.

Por eso al profundizar en la pata universidad dividimos el trabajo en cuatro planos: el rol (inalcanzable) de la Universidad tironeada entre la complicidad con lo que hay y la tentación de convertirse en heraldo de lo que deberia haber,tal como nos habia abierto el camino Jose Luis Brea, los limites insuperables de la universidad existente, los cambios tectònicos que estan destrozando a la universidad milenaria, y el rol de los neodocentes que deben reiventarla al mismo tiempo que la dinamitan munchauhestamente.

La Universidad que transitamos a diario (con diferencias abismales si estamos en Argentina o en España, en Africa o en Japon, si hablamos de las corporativas o de las publicas desahuciadas, de las de negocios berretas como la McDonalds y del sueño de los futuristas como pueden ser la Singularity o las muchas que inventario Olga Gil Garcia en su fascinante inventario del lunes pasado) dice cumplir con las siguientes funciones (eternas)

– Transmitir conocimiento
– Crear conocimiento
– Desarrollar a las personas
– Ayudar a la sociedad
– Determinar las habilidades
– Plantar la inovaicon.

Pero como una pleyade de trabajos lo ha revelado hasta el hartazgo, todas estas promesas y templates se derriten como hielo en el desierto cuando encontramos que

– los costos son altísimos
– la demanda de saber no se pliega a su existencia física
– ya no contralamos el reloj de la demanda
– los expertos son cada vez mas locales
– las universidades han deshabilitado hace rato el boton de su propio cambio
– las universidades solo contratan a gente que quiere ser miemnbro de su club
– el tenure ya no funciona mas

Cambios tectónicos que no tienen marcha atrás

Estamos pues frente a cambios tectónicos que ponen en cuestión ya no solo las contradicciones filosóficas, los desaguisados adoministrativos, la falta de interes del Estado por financiar a quienes lo cuestionan, la bajísima tasa de retención, la imposibilidad de competir con las ofertas abiertas, la facilidad de traslado de un lado al otro del planeta (real o virtualmente) de la demanda frente a una oferta mas enquistada que una roca, sino frente a cambios tectónicos que barren un espectro que va desde lo cognitivo a lo económico, de lo social a lo emocional, que no encuentran ni interpelación ni mucho menos respuesta en la oferta universitaria.

Estamos relevando entre estas discontinuiaddes radicales (distintos temas que han sido materia de exposiciones en las centenares de charlas que hemos ao en los últimos años)

– Cambios en los estilos de aprendizaje
– Colapso de la estructura disciplinaria
– Aceleración de los ciclos cognitivos de los nativos digitales
– Achatamiento de la jerarquia de conocimiento
– Consumidores hiperinteligentes
– Codiseño de la curricular a manos de los empleadores
– Independnecia de la localización
– Omnipresencia ubicuidad, catalizacion interneteana

Frente a esta avalancha de cambios y repiqueteos, habida cuenta de la infinita cantidad de congresos y eventos donde desde centenares a miles de rectores se reúnen, para irse con las manos tan vacías y las expectativas tan melladas como cuando llegaron a la convocatoria (es impresionante el efecto catártico que tienen estas congregaciones, evitando sistematicamente enfrentar al monstruo de frente), queda vez mas claro que la reinvencion de la universidad esta ligada a un cambio disruptivo en sus funciones, que por ello mismo difícilmente acaecera.

Apostando desesperadamente a las profesiones emergentes

En vez de teorizar tanto, de declamar en jauría y de llorar por tiempos perdidos que nunca existieron, seria mucho mas conveniente intentar definir las profesiones emergentes… y en consecuencia (de)formar para generar estos postprofesionales, y al mismo tiempo definir el rol que deben tener los postdocentes, que cada vez mas se parecerán a los mejores críticos de antaño, a los mejores dinamizadores, a los mejores motivadores, a los mejores inspiradores y sobretodo a los mejores parteros de esta nueva era de la historia.

A fin de aclarar el punto señalamos a continuación en nuestra charla los roles que deberían (algunos por suerte ya lo estamos haciendo) cumplir estos neodocentes, debiendo convertirse:

– Diseñadores de experiencias
– Project managers
– Inversores (angels)
– Curadores
– Diseminadores de recursos
– Coachers ontologicos
– Validadores.

Un buen paso para ir en esta dirección es contratar y trabajar con gente que opine, actue y sienta muy distinto a como lo hacemos nosotros. La homofilia es tan peligrosa en el rediseño institucional como la homofobia. Si bien a veces conviene exacerbar los ánimos para obtener resultados, al mismo tiempo es necesario hacerlo en sentido contrario -y dejar rienda libre a la disidencia interna fundada-, si queremos obtener resultados/sintesis realmente valiosos.

Es imposible ponernos a teorizar acerca del futuro de la universidad, si al mismo tiempo no nos sumergimos bien dentro del barro generado por las contradicciones culturales del capitalismo (como lo avizoró Daniel Bell hace ya casi medio siglo y como lo están retrabajando actualmente talentos como Sennett, Verdu, Castells, Lash, Sfesz, etc).

Si bien Habermas tenia razón en que no debemos abandonar la consternación cambiante frente al mundo de la vida, no lo es menos que al haberse quedado preso de sus teorías consensualistas (en un mundo crecientemente agonico), Habermas es incapaz de entender el fracaso de la idea moderna de la universidad, porque ya no es posible, ni necesario, trabajar en la formación integral, unificada, densa e inamovible del carácter).

Las Universidads a las que apostamos y por las cuales luchamos día a día, hipervaloran las hablas particulares, están interesadas en construir instituciones resilientes (autorreorganizables como en los mejores ejemplos de los autómatas autoreproductores de Von Neumann) permitiendo soportar la heterogeneidad de los saberes, en diáspora creciente.

Estamos pasando del endiosamiento de un sujeto supuesto saber a un sobjeto personalista

Sabemos que los pespuntes que venimos de tejer son incipientes y están a años luz de los planteos y la propuestas que hacen falta para inventar una Universidad 2.0. Sin embargo como siempre corresponde a estas iniciativas, si queremos brindar esos lineamientos, necesitamos retroprogresivamente ir al pasado, imaginar el futuro, anclarnos en el presente en forma iterativa, ininterrumpida y con los ojos de la mente cada vez mas abiertos. Frente a posibilidades inimaginadas hoy, basadas no en la revisión adocenada de lo existente, sino en la creación de formatos, soportes, agenciamientos y estructuras liquidas, que de una vez por todas nos permitan que lo que hoy hacen pocos se convierta en un commodity de las multitudes.

No será fácil, el intento seguramente fracasará, pero cambiarán los porcentajes y los pisos y los techos, y eso es a lo mas que podemos aspirar. Que igual está a una distancia infinita de los discursos y prácticas que eventos que florecen hoy por doquier y que escandalizan con sus ingenuidad o molestan con su hipocresía, dejan al descubierto.

Y todo fue tan fugaz como intenso. Y las tres jornadas interminables de trabajo en Santander ya se almacenan, como en los servidores de la UIMP, en la memoria y el banco de los recuerdos. Cruzando por última vez el pasillo que llevaba de mi habitación a la sala de reuniones en el primer piso, quise tomar un foto del título de nuestro seminario pegado a la puerta, pero ese instante ya había pasado. Lo que nos había sustituido era uno de los últimos encuentros del verano santandarense sobre gastroenterología.

Desde que llegué el domingo hasta que me subí a un avión de Air Nostrum de Santander a Barcelona pasaron infinidad de cosas, fundamentalmente, dentro de ese aula estrecha y atiborrada de curiosos y entusiastas. Porque convengamos que no hubo detractores sino implementadores, porque no hubo muchas criticas a la ideología 2.0 sino mas bien ganas de abrazarla y extenderla. Durante tres días todos fuimos evangelistas y no había nadie dentro de la sala a quien convencer porque todos lo estábamos y muy mucho.

El temario se cumplió a rajatabla, hubo infinidad de exposiciones, por lo que pude apreciar que en España han avanzado bastante en intentos de llevar el 2.0 a las universidades, y si bien los resultados son dispares y tengo muchas dudas acerca de las estrategias, al punto tal de que alguien llego a plantear un un mundo AM-DM (antes de Moodle y después de Moodle), mientras curiosamente la mayoría de los practicante todavía estan apegados a Moodle, lo mas interesante fue no tanto el contenido de las charlas, como su formato, y especialmente lo no dicho o mejor aun no suturado entre tantas preocupaciones.

Endogamias, homofilias y mas alla

Me explico. Lo anticipé en la introducción a mi charla del lunes y quedo confirmado con creces en el cierre. Ya no somos los frikis o los outsiders de antaño. Si hace 20 años cuando Tim Berners-Lee le pedía con desesperación a sus jefes en el CERN que le dieran presupuesto y dotación, para recibir un sonoro, «arreglátelas como puedas«, hoy, quienes en su momento fuimos los locos de Archi y Veronica, de WAIS y Gopher, de Mosaico y de los weblogs, ahora somos apenas unos pioneros, a los que se nos presta una atención molesta, porque siempre terminamos escupiendo el asado.

Los tres keynoters de UIMP 2.0 estamos en la misma situación. De los tres actualmente quizás Brian Kelly es el mas institucionalizado, como que es el web advisor para toda Inglaterra de las estrategias digitales, siendo ese país uno de los que mas ha avanzado en la digitalizacion de la educación, aunque curiosamente acaban de cerrar BECTA, y quienes tienen mas claro que nadie que la alfabetización digital es irreductible a la analógica y no su mera continuacion.

Brian conoció la web en enero de 1993, cuando recién habia menos de 50 sitios web. Un día Robert Caillou -autor de una de las interesnates historia de la red y colaborador inicial de Berners-Lee- tocó a su puerta anunciando la buena nueva de la web. No sé cuando Steve Hargadon, otro de los keynoters vio por primera vez una página web, pero seguramente debe haber sido en esa época. A mi me tocó debutar en Octubre de 1994 en el MIT de la mano de Marina Umaschi, en una enorme sala con conexión dedicada, donde pude avizorar que el mundo ya no sería igual despues de este shock de acceso a la información (o bomba cognitiva como lo bautizo Mara Balestrini el otro día hablando de cosas parecidas)

De porque acceso e información son dos cosas muy diferentes

Aquí la palabra clave es acceso y no información. Porque lo que ha hecho de Google el partero de la historia no son el medio millón -o probablemente mas- de servidores que tiene, sino en haber ordenado -para su uso y para el nuestro en partes iguales y muchas veces peligrosas- y de haberse convertido en la base de datos de las intenciones de la humanidad, como bien dice John Batelle en The Search.

En cuanto a Steve Hargadon que presentó Using social software to enhance learner engagement, y que está metido hasta el caracú en el desarrollo de las universidades 2.0 al margen de las hegemónicas y prestigiosas, tuve una larga charla con el camino al aeropuerto, donde me fue descubriendo punto por punto cual es su agenda 2.0, que posibilidades tenemos de nuclearnos como alternativas al movimiento de institucionalización de lo 2.0 dentro de los esquemas preexistentes.

Porque de eso trató el congreso en el nivel no manifiesto sino latente. ¿Para qué queremos Universidades 2.0? Para hacer lo mismo que hacíamos con/en las 1.0. ¿Se trata meramente de generalizar la educación virtual -que en la mayoría de los casos no es otra cosa que abaratamiento de costos- como forma de evitar (bonapartistamente) un cambio mas profundo? ¿Estamos tan obsesionada con los sistemas de gestión, que preferimos las funcionalidades que en esa dirección tiene Moodle, ante el riesgo de que con sistemas abiertos mucho mas sintonizados con las necesidades de aprendizaje, perdamos exámenes y portafolios?

Pero si vamos mas detalladamente en dirección de algunos elementos de filosofía de la historia, de modelos organizacionales y de formatos de construcción de identidades personales y colectivas, como proponen una pléyade de autores citados durante la conferencia (entre los que están Richard Florida, Clay Shirky, Daniel Pink, Henry Chesbrough, Andres Schuchny, etc etc) ¿la Universidad 2.0 no aparece apenas como un caballo de Troya para hacer lo mismo de siempre con un nombre cambiado?

Ni tanto ni tan poco

No queremos ser ni demasiados cínicos ni demasiado escépticos. Porque hay mucho que recuperar positivamente de estas jornadas y sumaremos algunos ejemplos tanto prácticos como conceptuales a lo aprendido y recogido en los últimos meses. Porque de esto se trató este viaje a Santander. Como así también el que ocurrió hace 2 semanas a Baeza, y la lista se suma permanentemente. Aunque de Baeza a Santander notamos una cierta involución, que habrá que explicitar y anotar

En términos de marco institucional quizás sea difícil superar la propuesta de la UIMP, que fue extensamente sintetizada por Pablo de Castro, uno de los dos codirectores del curso junto a Andrés Pedreño mostrando la infinidad de detalles, implementaciones, propuestas y logros que ha conseguido hasta el momento. Hay que estudiar mas en detalle este modelo para adoptarlo y mejorarlo. Pero también para darle una vuelta de tuerca especialmente a la luz de este diagrama que acaba de hacer Tiscar Lara (ver arriba)mostrando las ventajas y limitaciones de la ubicación en cada uno de los cuadrantes, y la dificultad por comparar experiencias que se manejan segun ejes, condiciones y necesidades muy diferentes.

Lo mejor de lo mejor… a mi gusto

También fueron llamativos los aportes de Elvira San Millan Fernández (Ciudadanía digital en un municipio) y de Juan Jose Calderon Amador (@eraser) (facebookizacion/twitterizacion de la relación social), Ricardo Maturana (Vida digital para aprender) y Alvaro Cabezas Clavijo (Recursos de la ciencia 2.0) y Andres Pedreño (Innovación abierta) que mostraron entre otras cosas que profesionales de vieja data como bibliotecarios y ex rectores, junto a gente que se ha ensuciado mucho las manos, puede proveer antecedentes y propuestas, a veces logradas (como en estos casos), a veces no (en muchas de las restantes presentaciones) en este camino hacia la web 2.0

Pero también quedó claro que lo que necesitamos no es UN modelo 2.0 de universidad, sino modelos diferentes de universidades aggiornadas, y que hacen posible implementar ideales maravillosos rara vez concretados y con cambios brutales de actitud que no se perciben salvo honrosas excepciones, ni en la cúpula, ni en el medio ni tampoco en la masa del profesorado.

Por eso ejemplos como los de El Proyecto Rediseñar son tan llamativos en la medida que muestran en status nascendi como se pueden generar dispositivos de reinvencion del aula con todo en contra (sin apoyo institucional, sin fondos, sin tecnología, sin antecedentes) a partir de una asunción plena de los nuevos roles docentes, como indicábamos en la conferencia inaugural …

El cambio de actitud es una cosa seria y hay que reforzarlo ya

Lo digo en cada lugar adonde me invitan y llaman para abrir la boca. No es cuestión de aptitud sino de actitud. La docencia 2.0 es la misma buena docencia de siempre (en la que descollaba Edith Litwin), pero que ya no es practicada por casi nadie. Es fácil echarle la culpa a la corporación educativa y también peligroso, a la inversa, hacer de los docentes unos mártires amenazados por los peligros de la eficiencia, la privatización y la gula.

Pero, al revés, lo que encuentros como éstos dejan en claro es que las búsquedas que se suceden sin parar muchas veces se aquietan ante algún fetiche tecnológico. Que si habiendo pedagogos que insanamente dejan en mano de los ingenieros las soluciones arquitecturales de gestión de la información y sobretodo de limitación de la creatividad a través de plataformas y soportes, y que si bien el 2.0 es un mantra al que nadie debería sustraerse, al mismo tiempo es una excusa para muchos para seguir haciendo lo mismo de siempre, pero bendiciéndolo con acrónimos vaciados de contenido.

Que nosotros, unos pelagatos, podamos imaginar cual es la deseable universidad del futuro, o que osemos suponer que muchas deberían desaparecer, fusionarse o reinventarse, es una función que no nos corresponde, ni nos llama demasiado la atención. Pero que en nuestra reinvención permanente del aula, habiendo diseñado un dispositivo de aprendizaje en mutación permanente, mucha de esa retórica se hace carne y los resultados son de una envidiable calidad y sustentabilidad en el tiempo, es algo que tampoco podemos ni queremos ignorar.

Por ello reuniones como University 2.0 aun con sus limitaciones y cuestionamientos, tienen un valor impar. Porque, otro de nuestros mantras, solo se piensa contra, no a favor o en el vacio. Y cuando vemos muchas implementaciones mas que bienintencionadas funcionar como coartada o cerrojo, nos damos cuenta de que la dialéctica imaginación instituyente/imaginación instituida no cesa jamás. Lo que hace nuestra labor mas desgastante pero al mismo tiempo abierta a infinitas intervenciones.

Y ese es el juego al que nos gusta jugar. Por eso recomendamos que en la seguramente existosa tercera versión de este curso el año próximo sean keynortes Diego Leal y Cristóbal Cobo, dos adalides en estos temas y problemáticas. Agradeciendo nuevamente la cordial invitación que me permitió sumergir durante estos 3 días inolvidables en infinitos juegos de lenguaje que tendrán oportuna recuperación en nuestro curso 2011 en Datos, les damos las gracias a los 50 participantes.

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