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La ilustracion penetra nuestros poros y no necesariamente para bien

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Wikipedia y algo mas

Ya tuvimos una escaramuza con la wikipedia unos meses atrás. Fue cuando nos enteramos de que en una operación mas que sospechosa el diario Clarin había denunciado que algún personaje nefasto había descalificado la Noche de los lápices convirtiendo a las víctimas en victimarios, tergiversando la cronología histórica y atribuyéndole al único sobreviviente motivos espurios incongruentes con muchas otras fuentes y testimonios (Ver «Vandalismo, autocorrección y desconcierto«).

Muchas veces nos han consultado y se nos ha cuestionado nuestra simpatía por esta herramienta de la cultura autoorganizativa que recientemente fuera calificado por nuestro ex-ayudante Alejandro Kaufman como una reconversion de los ideales de la ilustración en en meros aparatos cognitivos, artefactos destinados a usuarios que buscan en ellos variables instrumentales.


El comentario del medico-filosofo remite a los mil y un vericuetos que cuestionan, impugnan, refritan y una y otra vez enfatizan una reescritura de la historia que a los guardianes de la memoria y muy especialmente a los herederos de la ilustración les cae como una verdadera patada en el hígado.

Efectivamente estamos viviendo una etapa transicional con un carácter de desgarramiento y de cuestionamiento de certezas habidas por eternas hasta ayer nomás que toda discusión se polariza, que cualquier intento de generar un nuevo régimen discursivo, que cualquier cuestionamiento de lo viejo y cualquier apología de lo nuevo termina en un clasismo generacional, que difícilmente encuentre sosiego, pero sobretodo alguna claridad y alguna aclaración que haga mas fácil vivir en estos tiempos tan inhóspitos e incongruentes.

¿Pero realmente creemos que estos son tiempos de desasosiego frente a mundos mejores de antaño? ¿Hay alguien que sinceramente crea en las fantasías de Ivan Illich que solo veía en el presente el deterioro de los ideales renacentistas y que imaginaba que haber vivido en la edad media o al menos recrear sus postulados en la actualidad aportaría no solo tranquilidad sino sobretodo esperanza?

¿La argentinidad es patrimonio de muchos o de pocos?

Avanzando un poco mas en detalle en estas cuestiones hace pocos días el buen periodista que es Julian Gorodischer en su nota de Pagina/12 del 10 de noviembre titulada «Sobre la mirada de los otros» hizo un recorrido valioso acerca de las controversias que atrapan y atraviesan a la wikipedia. Pero no en general sino a partir de un cierto recorte de la construcción de la argentinidad por parte de los redactores autoconvocados que han contribuido en mínima medida a muchos de los 175.000 artículos que pululan en la versión castellana de la enciclopedia.

La nota juega con las censuras y las reescrituras, muestra que fácil que es en la wikipedia arrojar dudas y macular trayectorias, insiste en cierto carácter amarillista de algunos contribuyentes y sobretodo pone en cuestión la sacralidad del saber, pero autoreferencialmente en esta caída incluye a las propias entradas de la wikipedia.

Hablando largo y tendido con mi amiga Nora en su residencia coyoacana en el DF, el tema de la wikipedia ocupo un largo rato de nuestras suculentas conversaciones, con una de los mejores interlocutores que jamas haya encontrado.

Y si bien Nora confiesa su impotencia para domesticar a las tecnologías digitales siendo que estas la pueden, comentándome algunas reflexiones de algún intelectual sesudo acerca de un filosofo me dio pasto para pensar y me ayudo a pergeñar esta editorial nuevamente a 10.000 metros de altura -¿será que decidimos mudarnos con los cóndores últimamente?

¿Filósofos inmaculados?

El citado personaje -un francés del que no omito su nombre por pudor sino porque simplemente no lo registre- estaba sumamente molesto porque una entrada sobre Paul Ricoeur -filosofo contemporáneo fallecido de muerte natural a los 90 años en el 2005, al que el le había dedicado muchos años de sus afanes- había sido escrachado en la wikipedia apostrofado como fascista (en mi recorrido por la versión en castellano no encontré nada al respecto de esta controversia).

Si bien no conozco demasiado la obra de Ricoeur, aunque celebre hace muchas décadas la publicación de El conflicto de las interpretaciones. Ensayos de hermenéutica, 3 volúmenes: I. Hermenéutica y psicoanálisis, II. Hermenéutica y estructuralismo, III. Introducción a la simbólica del mal, Asociación Editorial La Aurora, Buenos Aires, 1976, y mas recientemente Tiempo y narración, T. 1, Configuración del tiempo en el relato histórico, Tiempo y Narración, T. 2, Configuración del tiempo en el relato de ficción, y Tiempo y Narración, T. 3, El tiempo narrado, Ediciones Cristiandad, Madrid, 1987, y ademas me encontré hace poco con un interesante libro-entrevista como Crítica y convicción, Editorial Síntesis, Madrid, 2003, jamas me hubiese imaginado que en su pasado cargaba la pesada mochila de haber algún día escrito una carta a no se quien en donde resaltaba su vocación totalitaria.

Curiosamente me llamo mucho mas la atención la actitud quejosa y escandalizada del funcionario de la humanidad viudo de Ricoeur, que la estrategia tramposa de invalidar una obra valiosa y afiatada a partir de la manipulación periodística a través de un copete escandaloso (después de todo ¿qué reputación resiste a un archivo copioso?).

Indagando con Nora un poco mas acerca de esta santa indignación que abroquela a los intelectuales y les hace invalidar ya no las herramientas informáticas en términos de acceso, sino mas bien los estragos que su uso colaborativo puede hacer en el tejido del saber enciclopédico, reservado a pocas y augustas manos durante siglos, sino milenios, convinimos que lo que esta en juego acá es una distinción ancestral entre alta y baja cultura.

Cultura altisima, cultura bajisima

Los intelectuales de ayer, de hoy y de siempre endiosan los valores de la ilustración, califican en forma mas que arbitraria el ser por el ser de la lectura («leo, luego existo»), imaginan que uno es antes que ninguna otra cosa lo que lee y por lo tanto quejumbrosamente creen ver en el eclipse de la lectura a la propia extinción del modo de ser de la humanidad letrada.

Saliéndonos sin demasiada dificultad a los comentarios que Beatriz Sarlo pronuncio en Tiempo Presente, denostando la facilidad con que ciertos intelectuales peronistas y marxistas habrían confundido la historia con el testimonio personal, insistiendo en que para entender los años 70 mas que referencia a las practicas y elecciones comprometidas personales lo que habría que hacer es una reseña cuidadosa y cejijunta de las ideas, ignorando en la misma movida que lo que paso en esa década prodigiosa tuvo tanto que ver con el pensamiento como con la acción, e imaginando que la producción y distribución de las ideas es lo que construye verdaderamente la cotidianeidad y la historia, Beatriz se pronuncia decididamente por la enciclopedia diderotiana y descartaría por innecesaria pero sobretodo por chabacana y relativista un esfuerzo como la wikipedia.

Verdaderamente me sorprende cada día mas esta recurrencia inusitada de la ilustración en nuestras discusiones y sobretodo en la valoración de nuestra actualidad. Me parece sinceramente una perdida innoble de tiempo y una fantasía mas que corporativa insistir obcecadamente en que la erudición y la hermeneutica, la exégesis y el saber pasan exclusivamente por la lectura y que el resto de las experiencia semiótico-cognitivas solo remiten al entretenimiento o al vacío.

Mil intenciones

Hay mil usos pero sobretodo mil intenciones en la redacción de artículos de la Wikipedia. Hay mil y una forma de trasmitir conceptos pero sobretodo sensaciones que no pasan por la argumentación lógica (y si tal vez por la comprensión patica como insiste Julio Cabrera) ni por el papel. La proliferación de pantallas esta generando una revalorización de la complejidad narrativa como bien lo anticipo Steven Johnson en Everything bad is good for you, y como acaba de reafirmarlo Henry Jenkis en su notable Convergence Culture. Where Old and New Media Collide

Por todo ello le deseamos y auguramos larga vida a la Wikipedia, a la cultura popular y a cualquier formato audiovisual que nos ayude a decantar este presente y nos de herramientas y perspectivas para convertir este caos en algo de orden sin que para ello debamos negarlo y refugiarnos en atalayas nostálgicos pero sobretodo en conceptos romos e impotentes.

Publicado enReveladores

Un comentario

  1. Diana Manero Diana Manero

    Estimado Aejandro: es esta una vía apropiada para hacerle una consulta?
    O debo enviársel a algúna dirección de correo que me de?
    Muchas gracias
    Ing. Agr. (Máster NTIC)Diana Manero
    Fac. Cs. Agropecuarias
    Univ Nac de Córdoba

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